Introducción histórica

El ciclo artúrico —o ciclo de la materia de Bretaña— forma parte del imaginario colectivo europeo desde la Edad Media. Sus raíces hunden sus orígenes en leyendas celtas y relatos orales transmitidos desde el siglo V d.C., cuando los pueblos britanos luchaban por resistir la invasión anglosajona tras la retirada romana de Britania. A partir del siglo XII, autores como Geoffroy de Monmouth (Historia Regum Britanniae) y Chrétien de Troyes dotaron de cuerpo literario a las figuras de Arturo, Merlín, Ginebra o Lancelot, fundiendo historia, mito y cristianismo en un tapiz épico que exaltaba el ideal caballeresco y el poder redentor del Santo Grial1.

Estas leyendas, reescritas durante siglos, han sido interpretadas como símbolos del orden social feudal2, de la virtud moral cristiana3 y de la búsqueda de un mundo justo. Pero también reflejan la decadencia de los ideales, la traición y la caída del héroe4. En este terreno ambiguo y atemporal se inscribe Excalibur, obra crepuscular que reinterpreta el mito desde una mirada contemporánea, filtrada por la estética posmoderna y las angustias del siglo XX.
Fechas clave
- 410 d.C.: Saqueo de Roma por los visigodos de Alarico. Supone un golpe simbólico a la autoridad del Imperio romano en Occidente.
- 429 d.C.: Misión de San Germán de Auxerre a Britania para combatir el pelagianismo; indica la continuidad del cristianismo tras la retirada romana.
- 430-450 d.C.: Época probable de una figura histórica que pudo inspirar al rey Arturo, posiblemente un caudillo britano llamado Ambrosio Aureliano o Artorius.
- 451 d.C.: Concilio de Calcedonia: afianzamiento de la ortodoxia cristiana frente a las herejías.
- 455 d.C.: Segundo saqueo de Roma, esta vez por los vándalos de Genserico.
- 476 d.C.: Caída del Imperio romano de Occidente.
- 496 d.C.: Conversión del rey franco Clodoveo I al cristianismo.
- 516 d.C.: Fecha tradicional de la batalla del Monte Badon, supuestamente liderada por Arturo.
- 527 d.C.: Ascenso de Justiniano al trono de Bizancio.
- 568 d.C.: Invasión lombarda en Italia.
- 711 d.C.: Invasión musulmana de Hispania.
- 732 d.C.: Batalla de Poitiers.
- 768-814 d.C.: Reinado de Carlomagno.
- 843 d.C.: Tratado de Verdún.
- 1136: Historia Regum Britanniae, de Geoffroy de Monmouth.
- 1485: Publicación de Le Morte d’Arthur, de Thomas Malory.
Ficha técnico-artística

Título original: Excalibur
Año: 1981
Duración: 140 minutos
País: Reino Unido / EE.UU.
Director: John Boorman
Guion: Rospo Pallenberg, John Boorman (basado en Le Morte d’Arthur)
Música: Trevor Jones (con piezas de Wagner y Carl Orff)
Fotografía: Alex Thomson
Reparto: Nigel Terry (Arturo), Nicol Williamson (Merlín), Helen Mirren (Morgana), Nicholas Clay (Lancelot), Cherie Lunghi (Ginebra), Liam Neeson, Gabriel Byrne, Patrick Stewart
Productora: Orion Pictures / Warner Bros
Sinopsis
Excalibur recrea el mito artúrico desde el ascenso de Uther Pendragon, la forja de la espada mágica Excalibur, y el nacimiento de Arturo, hasta la búsqueda del Grial y la disolución de la Tabla Redonda. La narración adopta un tono épico y simbólico, donde los personajes encarnan fuerzas primordiales: poder, deseo, traición, redención. La película no pretende contar una historia real, sino una alegoría del poder y su desgaste, del ciclo eterno que une la gloria y la decadencia.
Valoración crítica
John Boorman aborda el ciclo artúrico desde una óptica estética y simbólica profundamente personal, en un momento en que el cine buscaba reinventarse tras el desencanto del Nuevo Hollywood y el auge de los blockbusters5. Frente a la literalidad o el historicismo, Boorman opta por la metáfora: Excalibur no es una reconstrucción del pasado medieval, sino un poema visual sobre el mito eterno del poder, el deseo y la ruina.
La película se estructura como una tragedia griega medieval, donde cada personaje representa un arquetipo atemporal. Arturo es el rey inocente que debe madurar entre guerras y traiciones; Merlín, el mago crepuscular que anuncia el fin de los dioses antiguos; Morgana, la hechicera que encarna el deseo desbordado y la ambición corrosiva. El guion, en ocasiones fragmentado y lírico, no busca continuidad argumental, sino intensidad simbólica. En ese sentido, el montaje resulta más evocador que narrativo.
La elección musical —piezas de Wagner (Tristán e Isolda) y Carl Orff (Carmina Burana)— refuerza la dimensión operística del relato6. No estamos ante un drama psicológico, sino ante una sinfonía audiovisual. El uso expresionista del color, los reflejos metálicos de las armaduras, los verdes saturados de los bosques y la niebla omnipresente generan un mundo suspendido entre el sueño y la pesadilla.
En cuanto al contexto de producción, no es casual que la película se filmara en los primeros años de la era Thatcher en el Reino Unido, una etapa marcada por el desencanto social, el retroceso del Estado del bienestar7 y una relectura conservadora del pasado británico. Thatcher asumió el poder en 1979 con una agenda neoliberal8 que sacudió los cimientos sociales del país: privatizaciones masivas, desmantelamiento del sistema público, recortes en educación y sanidad, y confrontación directa con los sindicatos. Este periodo supuso la pérdida de miles de empleos en la industria tradicional, el aumento del desempleo juvenil y un recrudecimiento de las desigualdades regionales entre el norte obrero y el sur financiero.
En este marco, Excalibur puede leerse como una advertencia: el orden que nace del poder absoluto está condenado a la disgregación si olvida la justicia, el equilibrio y la fraternidad. La Tabla Redonda no se rompe solo por la traición personal, sino por el desequilibrio moral de sus pilares. Boorman, lejos de ofrecer una visión nostálgica, ofrece un relato sobre el agotamiento de los ideales, muy en sintonía con la crisis de legitimidad de las democracias occidentales tras el colapso del paradigma de los años sesenta. Mientras Thatcher afirmaba “There is no alternative” (No hay alternativa), Boorman sugería que el poder sin alma ni comunidad solo lleva a la ruina.
Excalibur se sitúa, deliberadamente, en los márgenes de lo histórico. No hay datación posible, ni referencias precisas a hechos reales. La fidelidad a las fuentes literarias —especialmente a Malory— es estilística más que documental. Así, la película transita libremente entre lo medieval y lo mitológico, entre lo cristiano y lo pagano, entre la realidad y el sueño. La ficción no pretende emular la historia, sino evocar lo arquetípico.
Este recurso a lo atemporal permite a Boorman dotar de universalidad a su mensaje. El mundo de Excalibur es menos un espejo del pasado que una alegoría de todos los tiempos. Por ello, su anacronismo no es un defecto, sino una herramienta narrativa: los caballeros no son figuras reales, sino símbolos del poder, la virtud o la traición. La historia desaparece, pero la verdad permanece.
Curiosidades
- John Boorman intentó previamente adaptar El Señor de los Anillos, pero al no obtener los derechos, recicló parte de los diseños y conceptos visuales para Excalibur.
- Nicol Williamson (Merlín) y Helen Mirren (Morgana) se detestaban fuera del plató, lo que potenció su tensión dramática en pantalla.
- La película fue rodada íntegramente en Irlanda, en paisajes naturales de exuberante verdor que evocan lo sobrenatural.
- Supuso el debut en cine de actores como Liam Neeson y Gabriel Byrne.
- Excalibur fue incluida por Guillermo del Toro entre las películas clave de su formación artística.
Aplicación didáctica
- Investigación literaria: Analiza la evolución del mito artúrico desde sus orígenes celtas hasta Le Morte d’Arthur de Malory. ¿Qué elementos se conservan en la película? ¿Qué se omite o se transforma?
- Contexto sociopolítico: Estudia las políticas de Margaret Thatcher y sus consecuencias. ¿Qué paralelismos pueden establecerse entre el Reino de Arturo y el Reino Unido de los años 80?
- Símbolos y arquetipos: Elabora un mapa de símbolos (Excalibur, el Grial, la niebla, la armadura, la traición). ¿Qué representan cada uno dentro de la narrativa?
- Comparación cinematográfica: Contrasta Excalibur con otras películas medievalistas (como Braveheart, El nombre de la rosa o El rey Arturo de Antoine Fuqua). ¿En qué difieren su tratamiento histórico y simbólico?
- Debate ético: ¿Qué papel juega el idealismo frente al pragmatismo en la construcción de una sociedad justa? ¿Tiene vigencia hoy el concepto de “Tabla Redonda”?
- Actividad creativa: Representar en grupos una escena del mito artúrico situada en el presente (por ejemplo, un instituto como corte feudal), respetando el tono simbólico de la película.
Más información
- Ab Initio. Excalibur, de John Boorman (1981). Comentario histórico de la película. Dialnet.
- CAMPBELL, J. (2014). El héroe de las mil caras: psicoanálisis del mito. Gerona: Atalanta.
- DAZA, J. L. (16 de mayo de 2021). #ZNCine – Crítica de Excalibur, de John Boorman – Zona negativa. Zona Negativa. https://www.zonanegativa.com/zncine-critica-de-excalibur-de-john-boorman/
- FRISACH, E. N. (s. f.). Excalibur (1981). El Antepenúltimo Mohicano. https://www.elantepenultimomohicano.com/2018/11/cineclub-by-benq-excalibur-1981.html
- MALORY, T. (2024). La muerte de Arturo. Barcelona: Siruela.
- SANMATEU, C. et al. (2001). Guía para ver y analizar: Excalibur. John Boorman (1981). Barcelona: Octaedro.
- El Santo Grial, también conocido como Santo Cáliz, es una reliquia cristiana legendaria que se identifica con la copa utilizada por Jesús durante la Última Cena. Considerado un objeto sagrado, ha sido fuente de veneración, inspiración y numerosas leyendas a lo largo de la historia. ↩︎
- El feudalismo fue un sistema estructural dominante en la Europa occidental medieval, vigente aproximadamente entre los siglos IX y XV. Se articulaba en torno a la descentralización del poder político, la cesión de tierras —o feudos— a vasallos a cambio de lealtad y servicios, y una organización social jerarquizada en estamentos rígidos, con escasa movilidad entre ellos. ↩︎
- El concepto de virtud tiene su origen en el latín vir, que designa al varón, y remite a la raíz vis, fuerza. Desde sus raíces lingüísticas, la virtud fue entendida como una energía o capacidad propia del ser humano, que con el tiempo adquirió una connotación más elevada, relacionada con la perfección moral. En términos filosóficos, se define como una disposición estable que orienta nuestras facultades hacia el bien, actuando conforme a la razón y completando así su naturaleza.
La teología cristiana ha desarrollado una tipología específica de virtudes, distinguiendo entre las teologales (fe, esperanza y caridad) y las cardinales (prudencia, justicia, fortaleza y templanza). A ellas se suman las llamadas virtudes capitales, que se contraponen a los pecados capitales: humildad frente a la soberbia, generosidad contra la avaricia, castidad frente a la lujuria, paciencia ante la ira, templanza contra la gula, gratitud frente a la envidia y diligencia frente a la pereza.
Desde una perspectiva bíblica, se ensalza el ideal de virtud tanto en hombres como en mujeres. En Proverbios 31:10, se destaca el valor inestimable de la mujer virtuosa, comparándola con piedras preciosas. Asimismo, en Gálatas 5:22-23, se enumeran los llamados «frutos del Espíritu», considerados por muchos como virtudes cristianas: amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fe, mansedumbre y dominio propio. En conjunto, la Biblia puede leerse como un tratado ético orientado a modelar al ser humano a imagen de la virtud divina. ↩︎ - Vid. Campbell, J. (2014). El héroe de las mil caras: psicoanálisis del mito. Gerona: Atalanta. ↩︎
- El término blockbuster, traducido habitualmente como taquillazo, designa en la industria cinematográfica aquellas producciones de elevado presupuesto que consiguen una recaudación excepcional. Aunque su origen se remonta al lenguaje teatral, donde aludía a espectáculos capaces de llenar el aforo, en la actualidad se emplea para referirse a películas de amplio impacto comercial, a menudo respaldadas por campañas publicitarias de gran envergadura y un notable despliegue de efectos especiales. ↩︎
- La inclusión de piezas de Wagner (Tristán e Isolda) y Orff (Carmina Burana) en Excalibur responde a una estrategia estética que prioriza la evocación simbólica frente a la fidelidad histórica. La carga emocional y trágica del cromatismo wagneriano refuerza los vínculos entre amor y destino, mientras que la contundencia rítmica y coral de Orff aporta una dimensión casi ritual a las escenas de combate y poder. Boorman configura así una Edad Media arquetípica, más cercana al mito que a la crónica, en la que la música opera como agente expresivo y estructurador del relato fílmico. ↩︎
- El denominado Estado del bienestar —también referido como Estado benefactor— constituye un modelo socioeconómico en el que el poder público asume un papel activo en la provisión de servicios esenciales, tales como la sanidad, la educación y las pensiones. Su finalidad es mitigar las desigualdades sociales, redistribuir la renta de forma más equitativa y garantizar la igualdad efectiva de oportunidades entre la ciudadanía. ↩︎
- El neoliberalismo es una corriente económica que apuesta por reducir al mínimo la intervención del Estado en la economía, dando protagonismo al mercado. Defiende la libre competencia, la apertura al comercio internacional, la privatización de servicios públicos y la eliminación de regulaciones, con la idea de que así se mejora la eficiencia y se favorece el crecimiento económico. ↩︎