Los vikingos

Entre los siglos VIII y XI, los pueblos escandinavos protagonizaron una de las etapas más intensas de expansión territorial, comercial y militar de la Europa medieval. Conocidos como vikingos, estos hombres del norte surcaron los mares del norte de Europa a bordo de sus drakkars, sembrando el terror en las costas del Atlántico y el mar del Norte. Pero no sólo fueron saqueadores: también colonos, comerciantes y exploradores.La película Los vikingos nos sitúa en el siglo IX, en plena «era vikinga», cuando estos pueblos mantenían continuas incursiones en las Islas Británicas. Fue una época de tensiones constantes entre sajones y escandinavos, marcada por luchas por el poder, alianzas inestables y batallas épicas. Este contexto sirve como telón de fondo para la historia de Einar y Eric, dos medio hermanos enfrentados por el trono de Northumbria… y por el corazón de la princesa Morgana.
Fechas clave
- 793: Ataque vikingo al monasterio de Lindisfarne (Inglaterra), considerado el inicio de la era vikinga.
- 800-850: Intensificación de las incursiones vikingas en Inglaterra, Irlanda y la costa de Francia.
- 865: Llegada del Gran Ejército Pagano vikingo a Inglaterra. A raíz de entonces, se establece, progresivamente, el Danelaw, territorio inglés bajo dominio vikingo.
- 878: El rey Alfredo el Grande derrota a los vikingos en la batalla de Edington.
- 911: Se concede Normandía a los vikingos en Francia.
- 954: Expulsión definitiva de los vikingos del reino de York (Inglaterra).
- 1066: Fin de la era vikinga tras la derrota de Harald Hardrada en Stamford Bridge.

Ficha técnico-artística

Título y año: Los vikingos (The Vikings, 1958). Duración: 114 min.
País: Estados Unidos.
Director: Richard Fleischer.
Guion: Calder Willingham, basado en la novela de Edison Marshall.
Música: Mario Nascimbene.
Fotografía: Jack Cardiff.
Reparto: Kirk Douglas, Tony Curtis, Ernest Borgnine, Janet Leigh.
Productora: Bryna Productions / United Artists.
Sinopsis
En el siglo IX, tras la muerte del rey de Northumbria a manos de vikingos, su heredero es raptado sin saberlo y criado como esclavo. Con los años, Eric (Tony Curtis) se enfrentará a Einar (Kirk Douglas), hijo del caudillo vikingo Ragnar (Ernest Borgnine), sin saber que ambos comparten sangre real. La rivalidad entre ellos se intensifica con la llegada de la princesa sajona Morgana (Janet Leigh), prometida del rey Aella. El drama estalla entre traiciones, conquistas y luchas por el poder.
Valoración crítica
Los vikingos (Richard Fleischer, 1958) es, ante todo, un relato fundacional: no del mundo escandinavo, sino del mito cinematográfico del vikingo como figura icónica. Bajo la apariencia de un filme de aventuras con aroma clásico, se oculta una construcción ideológica que bebe tanto del Romanticismo del siglo XIX como de la mentalidad geopolítica del siglo XX.
Esta producción de Hollywood, rodada en el apogeo del cine épico, recrea el siglo IX desde una perspectiva más mítica que histórica. El guion no se obsesiona con la exactitud cronológica, sino que escoge una estructura de tragedia “shakespeariana”: dos medio hermanos enfrentados por el poder, el amor y la sangre, como en un Edipo nórdico o un Caín y Abel vikingos.
Kirk Douglas encarna a Einar con una mezcla de brutalidad y magnetismo que lo aleja del simple villano. Es el paradigma del líder bárbaro: cruel, dominante, pero también, valeroso y apasionado. Tony Curtis, en cambio, representa al héroe civilizado, noble de corazón, justo por convicción y, —como todo elegido—, portador de un destino. Ambos no sólo se disputan a Morgana, sino dos formas antagónicas de entender el poder: por la fuerza o por el derecho.
Desde lo visual, el filme ofrece un despliegue grandioso gracias a la fotografía de Jack Cardiff, que convierte los fiordos noruegos en un personaje más. Los planos abiertos, la niebla, el agua helada, las construcciones de madera y piedra, no sólo sitúan la acción, sino que transmiten una sensación de peligro constante, como si la naturaleza misma conspirara contra los personajes. La música de Mario Nascimbene añade tensión y solemnidad, enfatizando el dramatismo sin caer en la sobrecarga.
Ahora bien, más allá de su narrativa interna, Los vikingos debe entenderse, también, como un producto de su tiempo. Rodada en 1958, en plena guerra fría, no es difícil ver en Einar una encarnación simbólica de la amenaza exterior —el otro peligroso, impredecible, ajeno al orden occidental—, mientras que Eric representa los valores que la América de la posguerra pretendía universalizar: libertad, legitimidad, justicia, amor.
El cine, en ese momento, se encontraba en una encrucijada: la televisión empezaba a restarle público, y el sistema de estudios daba señales de agotamiento. En este contexto, las superproducciones de aventuras eran una estrategia para reafirmar el liderazgo cultural de Hollywood. No es casual que este tipo de películas insistan en la épica, en los paisajes exóticos, en los conflictos históricos que evocan valores universales. Los vikingos no es ajena a esta lógica: construye una historia “antigua” con un mensaje contemporáneo, sin ocultar su intención propagandística.
No hay que olvidar que estamos ante un filme estrenado apenas unos años después del “macartismo”, en un clima todavía marcado por la sospecha, la censura y el miedo al otro. En ese sentido, Einar podría leerse como un reflejo del enemigo comunista: bárbaro, autoritario, emocionalmente inestable. Eric, por el contrario, encarna la narrativa del self-made man, el héroe inesperado que asciende desde la oscuridad con la luz de la razón y la bondad. Esta polarización moral, tan característica del cine estadounidense de los años 50, sirve aquí no sólo para contar una historia, sino para reafirmar una ideología.
La figura femenina, Morgana, es también significativa. No tiene apenas agencia, pero es el eje de la disputa. Es “el territorio”: la princesa que debe ser poseída o protegida. Su valor simbólico —como ocurre en tantas narrativas medievales— radica en su papel como catalizadora del conflicto entre hombres. Su libertad, curiosamente, depende siempre de la voluntad de otros.
Por último, es interesante observar cómo la película —pese a su glorificación de los vikingos— no deja de presentar su cultura como primitiva, visceral, gobernada por la violencia y la superstición. Fleischer juega a la doble moral: fascina al espectador con el exotismo nórdico, pero le recuerda constantemente que esa brutalidad está llamada a ser superada por la civilización. En resumen, Los vikingos es mucho más que una película de aventuras. Es un espejo de las tensiones ideológicas de su época, un instrumento de mitificación cultural y una pieza clave dentro del cine histórico de posguerra. Vista hoy, puede parecer ingenua en su maniqueísmo1, pero sigue siendo un testimonio valioso de cómo el cine construye —y a veces distorsiona— nuestra mirada sobre el pasado.
Curiosidades
- La película se rodó en escenarios naturales de Noruega y Bretaña, lo que confiere autenticidad a los exteriores.
- El productor fue el propio Kirk Douglas, a través de su compañía Bryna Productions.
- Janet Leigh y Tony Curtis estaban casados en el momento del rodaje, lo que aportó un matiz extra a su química en pantalla.
- Douglas se lesionó durante el rodaje del salto desde la torre, pero no se detuvo la producción.
- Más de 200 extras participaron en el desembarco vikingo.
Aplicación didáctica
- Introducción: Busca y redacta información sobre Richard Fleischer, destacando sus obras más representativas.
- Contexto histórico: Compara el retrato que ofrece la película sobre los vikingos con lo que conocemos hoy a través de la arqueología y la historiografía. Utiliza Google Maps para ubicar las principales rutas de navegación vikingas y sus zonas de influencia.
- Valoración personal: ¿Crees que la película reconstruye fielmente la historia vikinga? ¿Detectas elementos actuales proyectados en su narrativa? ¿Podríamos identificar hoy nuevas formas de “barbarie” con ropaje moderno?

Más información
- National Geographic. (s.f.). Cómo vivían los vikingos. National Geographic Historia. https://historia.nationalgeographic.com.es/a/como-vivian-los-vikingos_18953.
- TRIGALES, J. G. (8 de diciembre de 2010). «Los Vikingos», la aventura perfecta. Espinof. https://www.espinof.com/cine-clasico/los-vikingos-la-aventura-perfecta
- Vikingos. https://www.worldhistory.org/trans/es/1-16741/vikingos/.
- Visit Norway. (s.f.). Vikingos: historia, cultura y tradiciones. https://www.visitnorway.es/que-hacer-en-noruega/arte-cultura/vikingos/.
- WHITTOCK, M., et al. (2019). Los vikingos: de Odín a Cristo. Madrid: Rialp.
- World History Encyclopedia. (s.f.). Barcos vikingos. https://www.worldhistory.org/trans/es/1-16769/barcos-vikingos/.
- Doce grandes líderes vikingos. https://www.worldhistory.org/trans/es/2-1296/doce-grandes-lideres-vikingos/.
- Ragnar Lothbrok. https://www.worldhistory.org/trans/es/1-17301/ragnar-lothbrok/.
- m. peyor. Tendencia a reducir la realidad a una oposición radical entre lo bueno y lo malo. Vid.: https://dle.rae.es/manique%C3%ADsmo ↩︎