CineHistoria

Lumière en exclusiva

¡Qué suerte tuvieron aquellos privilegiados testigos del inminente nacimiento del cine que tuvo lugar el 28 de diciembre de 1895, en el Salon Indien du Grand Café de París! Y no me refiero a los asustadizos espectadores que propagaron la gran noticia del estreno de la primera película de la historia entre sus allegados con la seguridad de salir indemnes de una amenaza como la de un tren aproximándose hacia ellos desde una pantalla de cine sin solución de continuidad. No, no me refiero a ellos, sino a los gerifaltes de la Sociedad para el Desarrollo de la Industria Nacional de París, que fueron espectadores, quizás, de la primera première del cine (perdón por el epíteto). Para muestra, un botón. Permítaseme recordar, por añadidura, el homenaje que rindió a los hermanos Lumière (mediante la furtiva mirada del álter ego del gran George Méliès, Ben Kingsley), el ínclito Martin Scorsese, a través de La invención de Hugo (2011), basado en la obra homónima de Brian Selznick, que, por cierto, merece la pena leer [efn_note]Selznick, B. & Bastida, X. (2007). La invención de Hugo Cabret. Madrid: Ediciones SM.[/efn_note].